Author: NAD Stewardship
Dios cuida tanto de nosotros que, como Elena G. White declara: "El nos da sus beneficios en gran cantidad. Estamos en deuda con él por el alimento que comemos, el agua que bebemos, la ropa con la que nos vestimos y el aire que respiramos. Sin su providencia especial, el aire estaría lleno de pestilencia y veneno. El es un generoso benefactor y preservador."(Consejos sobre Mayordomía Cristiana, p. 19).
"La generosidad sistemática no debe ser hecha compulsión sistemática. Son ofrendas voluntarias que son aceptables a Dios. La verdadera generosidad brota del principio del amor agradecido. El amor a Cristo no puede existir sin el amor correspondiente hacia aquellos a quienes Él vino al mundo para redimir. El amor a Cristo debe ser el principio rector del ser, controlando todas las emociones y dirigiendo todas las energías. El amor redentor debe despertar todo el tierno afecto y abnegada devoción que posiblemente puede existir en el corazón del hombre. Cuando este es el caso, no se necesitarán llamados emotivos para quebrantar el corazón, para quebrantar su egoísmo y despertar sus simpatías latentes, para progresivamente hacer un llamado a ofrendar generosamente para la preciosa causa de la verdad "(Testimonios, t. 3, p. 396, de la edición en inglés).
Llamado: El énfasis del Presupuesto Mundial es ministerios televisivos adventistas. Estos ministerios llegan a millones de personas que buscan consuelo, consejos y soluciones espirituales a las situaciones de la vida. Al dar hoy, permitamos ser conmovidos por la compasión y no como obligación, "¡porque Dios ama al dador alegre!"