There is a stretch of water in the Pacific Ocean near Vancouver Island off the coast of Canada that is acoustically dead. It is known as “the zone of silence.” The depths of these waters hold many ships that, oblivious to the dangerous cliffs ahead, crashed and sank. No siren or bell can be heard in this area, so ships cannot be alerted to the imminent danger. The zone of silence is a death trap. Similarly, many professed Christians seem to be uncomfortable with the subject of money and giving. They are acoustically dead on this subject.
On his way to Jerusalem, Paul stopped by Ephesus and called the church elders for a final message. Acts 20:35 captures Paul’s words: “It is more blessed to give than to receive.” It has been suggested that this was Paul’s own summary of Jesus’s teachings. Giving is central to the Christian message as opposed to selfishness and greed. Receiving without giving is self-defeating.
Happiness comes when believers are on the giving side instead of the receiving side, regardless of how much or little one has. Believers receive more by giving, since a giving life is a joyous life. It is only by giving that believers come to understand the fuller meaning of the Gospel—and find the fullest joy of life. “It is more blessed to give than to receive” (Acts 20:35). If believers are skeptics, they should try it sometime! (Charles M. Crowe, Stewardship Sermons, 121–130).
What a joy it is to exercise the gift of giving. Your giving today blesses this congregation and helps to fund the mission.
Author: Nelson Silva
Video Presenter:
Nous donnons nos offrandes en réponse à la grâce expérimentée. “Le Seigneur n’a pas besoin de nos offrandes. Nous ne pouvons pas l’enrichir par nos dons. Le psalmiste dit : “Toutes les choses viennent de Toi, et de ce qui t’appartient, nous t’avons donné. 1 Chroniques 29.14. Cependant Dieu nous permet de montrer notre appréciation de ses grâces en sacrifiant nos efforts pour apporter la même chose aux autres. Ceci est le seul moyen par lequel il est possible pour nous de manifester notre gratitude et notre amour à Dieu. Il n’a rien prévu d’autre” (Conseils à l’Économe, p. 20.3).
Les offrandes ont une signification seulement lorsqu’elles reflètent ce que nous sommes par rapport à Dieu. Elles sont l’expression de notre relation, notre louange à Dieu et notre volonté d’admettre qu’il est le propriétaire - que tout ce que nous avons vient de Lui. Le Psalmiste nous lance un défi : “Rendez à l’Éternel gloire pour son nom! Apportez des offrandes, et entrez dans ses parvis ! Prosternez-vous devant l’Éternel avec des ornements sacrés. Tremblez devant Lui, vous tous habitants de la terre ! ” (Psaume 96.8, 9)
Les offrandes régulières et systématiques reflètent notre partenariat avec Dieu. La dîme vient en premier, et Dieu dit qu’elle est la sienne. Le retour de la dîme est un test de notre loyauté. Les offrandes viennent en deuxième lieu comme un test de notre gratitude.
Appel : Montrons notre loyauté et gratitude à Dieu en Lui apportant nos dîmes et nos offrandes comme partie de notre expérience d’adoration aujourd’hui.
Author: Nelson Silva
Video Presenter:
Há um braço de mar no Oceano Pacífico perto da Ilha de Vancouver ao largo da costa do Canadá que é acusticamente morto. Ele é conhecido como a “zona de silêncio”. A profundidade dessas águas contém muitos navios que, alheios os perigosos penhascos à sua frente, colidiram e afundaram. Nenhuma sirene ou campainha pode ser ouvida nessa área, assim os navios não podem ser alertados do perigo iminente. A zona de silêncio é uma armadilha mortal. Da mesma forma, muitos cristãos professos parecem sentir-se desconfortáveis quando o assunto é dinheiro e doações. Eles são acusticamente mortos sobre este assunto.
Em seu caminho para Jerusalém, Paulo parou em Éfeso e chamou os anciãos da igreja para uma mensagem final. Atos 20:35 apresenta as palavras de Paulo: “Mais bemaventurado é dar que receber”. Tem sido sugerido que este era o próprio resumo que Paulo fazia dos ensinamentos de Jesus. O ato de dar é central para a mensagem cristã em oposição ao egoísmo e ganância. Receber sem dar é autodestrutivo.
A felicidade vem quando os crentes estão na condição de dar, em vez de no lado de receber, independentemente do muito ou pouco que a pessoa tenha. Os crentes recebem mais dando, uma vez que uma vida de ofertas é uma vida de alegria. É somente pelo ato de dar que os fiéis compreendem o significado mais pleno do Evangelho e encontram a alegria mais completa de viver. “Mais bem-aventurado é dar que receber” (At. 20:35). Se os crentes são céticos, eles deveriam tentar a fé algum dia! (Charles M. Crowe, Stewardship Sermons – Sermões Sobre Mordomia, 121-130).
Que alegria é podermos exercitar o dom de ofertar. Sua oferta hoje abençoará esta congregação e ajudará a financiar a missão.
Author: Nelson Silva
Video Presenter: Richie Silie
PRESENTER: Richie Silie
Hay una porción en el Océano Pacifico cerca de la isla de Vancouver frente a la costa de Canadá que está acústicamente muerto. Es conocido como la “Zona del silencio.” En las profundidades de estas aguas hay barcos que, ignorantes de los peligros de las rocas han chocado y se han hundido. No hay sirena o campana que pueda ser escuchada en esta área, de tal forma que los barcos no pueden ser alertados del peligro inminente. La Zona de silencio es una trampa de muerte. Similarmente, los cristianos profesos parecen estar incómodos con el tema de dinero y la dadivosidad. Están muertos acústicamente en este tema.
En camino a Jerusalén, Pablo se paró en Éfeso y llamó a los ancianos de la iglesia para darles un menaje final. Hechos 20:35 evoca las palabras del apóstol Pablo: “Es mejor dar que recibir”. Se dice que este es un resumen de Pablo de las palabras de Jesús. La dadivosidad es un tema central en el mensaje del cristianismo, opuesto al egoísmo y la avaricia. “Recibir sin dar es autodestrucción”.
La felicidad se acerca cuando los creyentes practican la dadivosidad en vez de desear recibir. No importa cuán poco o mucho uno tenga. Los creyentes reciben más cuando dan, ya que una vida dadivosa es una vida de gozo.
Es al dar que los creyentes entienden completamente el significado del Evangelio y encuentran el gozo completo en la vida. “Es más bienaventurado dar que recibir”. ¡Si los creyentes son escépticos a esto, deberían intentarlo alguna vez! (Charles M. Crowe, Stewardship Sermons, 121-130).
Qué gozo es poder ejercitar el don de dar. Su dadivosidad hoy bendecirá a esta congregación y ayudará a proveer fondos para la misión.
Author: Nelson Silva
Video Presenter: Richie Silie
PRESENTER: Richie Silie
Hay una porción en el Océano Pacifico cerca de la isla de Vancouver frente a la costa de Canadá que está acústicamente muerto. Es conocido como la “Zona del silencio.” En las profundidades de estas aguas hay barcos que, ignorantes de los peligros de las rocas han chocado y se han hundido. No hay sirena o campana que pueda ser escuchada en esta área, de tal forma que los barcos no pueden ser alertados del peligro inminente. La Zona de silencio es una trampa de muerte. Similarmente, los cristianos profesos parecen estar incómodos con el tema de dinero y la dadivosidad. Están muertos acústicamente en este tema.
En camino a Jerusalén, Pablo se paró en Éfeso y llamó a los ancianos de la iglesia para darles un menaje final. Hechos 20:35 evoca las palabras del apóstol Pablo: “Es mejor dar que recibir”. Se dice que este es un resumen de Pablo de las palabras de Jesús. La dadivosidad es un tema central en el mensaje del cristianismo, opuesto al egoísmo y la avaricia. “Recibir sin dar es autodestrucción”.
La felicidad se acerca cuando los creyentes practican la dadivosidad en vez de desear recibir. No importa cuán poco o mucho uno tenga. Los creyentes reciben más cuando dan, ya que una vida dadivosa es una vida de gozo.
Es al dar que los creyentes entienden completamente el significado del Evangelio y encuentran el gozo completo en la vida. “Es más bienaventurado dar que recibir”. ¡Si los creyentes son escépticos a esto, deberían intentarlo alguna vez! (Charles M. Crowe, Stewardship Sermons, 121-130).
Qué gozo es poder ejercitar el don de dar. Su dadivosidad hoy bendecirá a esta congregación y ayudará a proveer fondos para la misión.
