Julio 20, 2013
Ofrenda de hoy: Nuestro Presupuesto de Iglesia

¿Alguna vez se paró cerca de un faro? O mejor aún, ¿ha visto la poderosa luz que ese faro produce al brillar a lo lejos? No existe nada mejor que un faro cuando uno está en medio de una tormenta, porque nos da una sensación de seguridad y esperanza. Juan describe a Jesús como la Luz Verdadera’[1] que da luz a todos los habitantes de este oscuro mundo. En el Sermón del Monte, Jesús describe a sus seguidores como la ‘luz del mundo’, y más adelante sugiere que deberían hacer brillar su luz ante los hombres, para que vean sus buenas obras.[2] ¡Este mundo necesita luz! Jesús y sus seguidores son esa luz.

Mientras adoramos hoy al ofrendar, los fondos que recogeremos irán para los diferentes ministerios de nuestro faro local, que es nuestra iglesia. Por supuesto que no es solo para las necesidades de nuestras instalaciones o edificio, sino también para nuestros ministerios. Nosotros somos la iglesia, el faro sobre un monte que no se puede esconder.

Oremos, “Señor, tú eres la luz verdadera. Sin ti estamos en la oscuridad y no podemos ver el camino. Sigue dirigiéndonos en esta jornada, para que nosotros junto con muchos otros en nuestra comunidad de fe, podamos verte cara a cara. Bendice estas ofrendas que te hemos traído como un acto de adoración. Oramos en el nombre de Jesús. Amén.”



[1] Juan 1:9

[2] Mateo 5:16